Parece como un sueño con la rapidez que pasan los días. Estamos para terminar el primer mes del año y pareciera que fue ayer que recibimos este nuevo año. Con las rapideces que pasan los días así también pasan nuestras promesas y resoluciones, así como las tomamos así las olvidamos. Pero en esta ocación quiero decirte que no olvides tus promesas y tus resoluciones para este nuevo año; si el fantasma del año pasado quiere perseguirte y decirte que todo va ser igual y que nada va cambiar. Reprende en el nombre del Señor todo pensamiento negativo y sigue adelante. Estamos en un nuevo año con nuevas resoluciones y yo se que Dios te dará la victoria. No te rindas, apenas estamos comenzando.

Filipenses 3:13 Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante,